Extraño edículo en metal oxidado, que recuerda un barco abandonado, que ubica este espacio de homenaje al actor malagueño. En una ciudad con tradición milenaria de cerámica llama la atención este pieza, víctima habitual de muchos grafitis de poca monta, aunque tal vez sea un guiño a las antiguas ferrerías de la ciudad. Quién sabe. Su diseñador igual nos podría contar algo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario