8.- Mosaico de Ntra. Sra. de la Piedad. Colegio de la Goleta. Málaga.

DEL LIBRO: MARÍA EN LOS RETABLOS CERÁMICOS DE MÁLAGA

Como cuarta apuesta se sugiere un retablo adosado en el primer patio del colegio de la Goleta, justo en la pared norte de su oratorio. Este centro educativo se halla en el margen este del puente de Armiñán, y para ser visitado habrá que contar con el permiso de las religiosas del recinto, que amablemente han concedido todas las facilidades para poder fotografiar el vidriado que cobijan. Se trata de una obra de madurez de Natalia Fernández Cuadra, del taller de Alicia Guerrero, que deja su rúbrica en el margen inferior izquierdo del lienzo.  Se trata de un regalo de la corporación nazarena al centro educativo con motivo del siglo y medio de existencia del mismo, efeméride que se conmemoró en diciembre de 2011, ratificandose así los íntimos lazos de unión entre estas dos instituciones de la Iglesia que tanto bien hacen en su entorno, en sus respectivos campos de actuación.  Molinillo, Piedad y Goleta son tres conceptos indisolubles y así queda grabado a fuego en un lienzo esmaltado y apaisado de 1,35 x 1,05 m, bordeado por una guadilla azul marino.

La peculiar disposición del conjunto queda solventada en las losetas con la inclusión de los apuntes urbanos de la capilla y el centro educativo, figurando toda la estampa en un paisaje rocoso a modo de Calvario. La pintora solventa con destreza las distintas perspectivas y tamaños de los dos edificios, y sobre ellos despliega un cielo que va tornando su colorido en distintas capas, como símbolo del paso del tiempo.  Además, el escudo corporativo cuadra el conjunto, que nos ofrece una postal fidedigna pero personal del Misterio, con los rostros correctamente enmarcados en la red nodular, y los clásicos elementos identificativos, como el brazo inerte, la morbidez del cuerpo, la fuerza de la rodilla de la Madre o su mirada de compasión. Un rótulo a modo de pie de foto culmina un mural de gran calidad. El patio porticado donde se ubica se convierte en una catequesis mariana, que comienza con la escultura en marmolina de la Virgen del Rosario acunando al Niño, y culmina con el mosaico de la Señora de la Piedad abrazándolo tras haber sido descendido de la cruz.