La terminación de las obras de rehabilitación de la antigua iglesia de la Aurora María, con la reapertura de los ventanales de su fachada norte, ha conllevado la recolocación de los clásicos mosaicos del Cautivo y la Soledad de San Pablo, obras de Juan y Amparo Ruiz de Luna, respectivamente.
Finalmente las piezas se han encajado bajo los óvalos de los ventanales, junto a dos parejas de farolitos eléctricos. El resultado es más que aceptable, aunque algo recargado, teniendo en cuenta el espacio disponibles, habiéndose perdido altura y visión desde la acera de la Rampa de la Aurora.
El mural del Señor, obra del mítico Juan Ruiz de Luna tuvo varias fracturas en su proceso de desmontaje. Una vez observado el resultado final tras la colocación, lamentamos calificar de "chapuza" el trabajo realizado con dos de los azulejos inferiores de tan valiosa pieza. Aquí tienen un detalle.
Con un mínimo presupuesto, ridículo e insignificante en comparación con la obra del conjunto del edificio, se podrían haber recompuesto estas piezas fracturadas, al igual que por ejemplo se hizo en el patio del Palacio del Obispo. El pegote de mezcla es sencillamente bochornoso.
Crítica constructiva.
La referencia de estos murales puede verla en:
https://mosaicosdemalaga.blogspot.com/2013/12/mosaico-118-ntro-padre-jesus-cautivo.html
https://mosaicosdemalaga.blogspot.com/2014/01/mosaico-173-ntra-sra-de-la-soledad-san.html
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